Kilómetros
aproximados: 220.
Nuevamente tocaba cambio
de zona, así que pusimos el despertador bien prontito, y algo antes de la 8’30 ya
estábamos saliendo.
Tras algo más de una hora
llegamos a LERMA, a esas horas hacía
bastante fresco, sobre todo por el viento; era lunes, así que todos lugares
visitables estaban cerrados, por lo que dimos un paseo y nos fuimos. Lo más
destacable son las casas porticadas de la Playa Mayor, y el Palacio Ducal que
hoy en día es el Parador Nacional.
El siguiente CALERUEGA, un pueblo pequeño y muy
tranquilo, lo más destacable aquí es el Monasterio de Santo Domingo de Guzmán,
pero al ser lunes estaba cerrado; dimos un tranquilo paseíto al sol y continuamos
la ruta.
Para la hora de comer
dejamos COVARRUBIAS, esta población
es conocida como “la cuna de Castilla” y fue declarada Conjunto
Histórico-Artístico Nacional en 1965. Merece mucho pasear por sus calles, había
poca gente y por algunos lugares íbamos solos; nos gustó mucho, sobre todo sus
casas de adobe y entramado de madera.
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| Papelera |
La desventaja de ser
lunes, es que habían muy pocos restaurantes abiertos, y los dos a los que les
teníamos echado el ojo estaban cerrados, acabamos en
Restaurante de Galo, pedimos de entrantes morcillas y
croquetas variadas, y de platos chuletillas y entrecots, que junto las bebidas
y dos postres, salimos por pareja a 50 €, caro para la calidad; sin estar mal,
desde luego no para ese precio, me parece un abuso pagar 7’20 € de pan, tampoco
nos sirvieron tanto.
Y ya el último pueblo del
día,
SANTO DOMINGO DE SILOS, aunque
eran poco más de las 5 de la tarde, cuando llegamos estaba desierto, hicimos el
check-in en
Hotel
Santo Domingo de Silos, dejamos las cosas y salimos a dar una vuelta.
Entre que al ser lunes el monasterio estaba cerrado
y que soplaba un aire bastante fresco, no encontramos prácticamente a nadie por
la calle, en el paseo tampoco nos llamó nada la atención, y además se puso a
llover, así que cuando nos lo permitió la lluvia, regresamos al hotel e hicimos un poco de tertulia en una de las
habitaciones.
A las 7 fuimos a una misa
en canto gregoriano en el Monasterio, no es que sea algo que nos encante, pero
es algo que tampoco tenemos al alcance en nuestro día a día.
Luego regresamos a la habitación
y preparamos el planing del día siguiente. Sobre 9 bajamos, y en vista de que
era lunes y estaba todo cerrado nos quedamos en el mismo hotel, tampoco
teníamos mucha hambre, así que pedimos algo de picoteo (morcilla, rabas de
calamar y jamón), junto con las bebidas salimos por pareja a 19 €.
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